Expulsaron al senador aliado de Milei preso en Paraguay pero el oficialismo objeta sesión
El Senado de la Nación aprobó la expulsión del senador aliado del gobierno Edgardo Kueider (Entre Ríos), preso en Paraguay por tráfico de divisas (quiso pasar con más de 200.000 dólares en efectivo sin declarar y es investigado por corrupción y lavado de dinero), con la aprobación de 60 votos, 6 rechazos y una abstención.
Mientras a expulsión promovida por el peronismo fue avalada por los radicales y por los libertarios a regañadientes, los votos negativos los aportaron cuatro senadores del PRO: Alfredo De Angeli (Entre Ríos); Carmen Álvarez Rivero (Córdoba); Andrea Cristina (Chubut) y Martín Goerling Lara. Los restantes lo aportaron el correligionario Maximiliano Abad (Buenos Aires) y Carlos Camau Espínola (Corrientes). La abstención, por su parte, la aportó Juan C. Romero (Salta).
La expulsión superó ampliamente los dos tercios necesarios aunque poco después se desató un escándalo, porque desde el gobierno nacional dicen que la vicepresidenta Victoria Villarruel, no podía presidir la sesión del Senado porque debía ocupar transitoriamente la jefatura de Estado porque Javier Milei salió de viaje a Italia horas antes de la sesión.
Desde el oficialismo buscaban en realidad que Kueider fuera sólo suspendido temporalmente, y evitar de esa forma que su banca fuera ocupada por su sucesora en la lista original, Estefanía Cora, dirigente alineada con la Cámpora.
Con la salida del legislador aliado al gobierno preso en Paraguay, el peronismo sumó una nueva banca estratégica y pasará a tener 34 legisladores.
Sobre la legalidad de la sesión, si bien Milei estaba de viaje y Villarruel debía estar ocupando su cargo, lo cierto es que no hubo acto de notificación notal al Escribano de Gobierno ni acta de firma para la sucesión formal establecida en la Constitución, porque desde el despacho del presidente sólo habían revelado informalmente el viaje.