Un nuevo conflicto se originó entre la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y la Selección femenina, luego de que las jugadoras Lorena Benítez, Julieta Cruz, Laurina Oliveros y Eliana Stabile renunciaran a representar al país en los amistosos ante Costa Rica con fuertes críticas a la AFA por ninguneos y destratos. Un sanguche de fiambre y una banana es el refrigerio el día que entrenan toda la mañana en el predio Lionel Andrés Messi de Ezeiza dirigidas por Germán Portanova.
Las protagonistas utilizaron las redes sociales para comunicar la decisión de no estar presentes en los compromisos ante el equipo centroamericano, los cuales se disputarán el viernes 31 de mayo a las 20.10 en el estadio Ciudad de Buenos Aires, mientras que el segundo está programado para el lunes 3 de junio a las 20.10 en la cancha de Platense.
Las cuatro futbolistas que representan a Boca Juniors presentaron su renuncia con algunas críticas por cuestiones organizativas. “Triste decisión y difícil de tomar. Esta fecha quiero dar un paso al costado, cansada ya de hace tiempo de la falta de interés hacia el fútbol femenino. Solo queremos ser valoradas y ojalá la generación que viene no pasen lo mismo”, publicó Stabile en un posteo en redes sociales. La defensora fue la última en comunicar su deserción.
La primera en manifestarse fue la fue la mediocampista Benítez, quien denunció en su cuenta oficial de Instagram que en los entrenamientos en el predio Lionel Andrés Messi de Ezeiza las integrantes del plantel no reciben desayuno ni almuerzo.
“¿La respuesta de siempre? ‘NO HAY PLATA’”, escribió, y detalló que solo les ofrecieron un sándwich de jamón y queso y una banana para comer.
Además, la futbolista que se desempeña en Boca agregó que desde la AFA les comunicaron que tampoco les iban a pagar los viáticos correspondientes a la fecha FIFA y que no les iban a dar entradas a los familiares para los dos próximos amistosos ante Costa Rica.
“De mi parte, decido no seguir dando la cara, poniendo el pecho por personas que solo aparecen para la foto”, recalcó Benítez, pieza clave del equipo en el último Mundial de Australia-Nueva Zelanda 2023.
“También remarcar que fue hecho acá para ‘NO TENER GASTOS’ y que las jugadoras no reciban nada ‘ya que no hay plata’. Pero a nuestras familias sí cobrarles $5.000 el ingreso al estadio. Y así millones de cosas que hemos pasado, siendo BOLUDEADAS una y otra vez”.
Posteriormente, mediante la misma red social, Cruz hizo pública su indignación con un fuerte descargo: “Representar a tu país, intentar siempre dejar todo, esforzarte, sacrificarte y dejando mil cosas de lado, llega un punto que cansan las injusticias, que cansa no ser valorada, no ser escuchada y peor aún ser humilladas”.
Por su parte, Oliveros tan solo publicó una serie de fotos en blanco y negro, con algunas frases que daban a entender su decisión de alejarse del equipo: “Con el corazón partido y mil ilusiones que se esfuman de a poco”.
La arquera, que también juega en Boca, ya tuvo un encontronazo con la AFA, ya que en 2019 se quedó fuera de la lista que disputó el mundial luego de criticar públicamente al ente regulador por presentar la camiseta del equipo con modelos y no con jugadoras. (La Capital)