Cristina defendió al gobierno y tildó de “mamarracho indignó” a la Corte
Ante más de 400.000 personas que se concentraron bajo la lluvia en Plaza de Mayo y desde un escenario con un despliegue tecnológico sin precedentes para un acto político no electoral, la vicepresidenta Cristina Kirchner dijo que pese a los errores el actual gobierno es “infinitamente mejor” que el de Mauricio Macri que lo antecedió, al tiempo que criticó con dureza a los miembros de la Corte Suprema, con el calificativo de “mamarracho indigno”.
Escoltada por su hijo el diputado nacional Máximo Kirchner y los ministros de Economía, Sergio Massa y el Interior, Eduardo de Pedro (dos de los presidenciables que tiene que Frente de Todos), la líder del Frente de Todos brindó un largo discurso centrado en los 20 años que se conmemoraban de la asunción de Néstor Kirchner.
Luego de desgranar los logros económicos y sociales que se consiguieron en los primeros años del kirchnerismo después de 2003 y atacar a quienes cuestionan el modelo, tuvo su referencia contra el poder judicial.
“Créanme que aquella Corte a la que Néstor pidió que se le hiciera juicio político, al lado de este verdadero mamarracho indigno que tenemos hoy… Nunca se dijo de ningún miembro de la Corte las cosas que se saben y que nos enteramos todos los días”, afirmó la vicepresidenta, para luego reclamar: “Es necesaria finalmente la renovación de ese pacto democrático. Volver a darle al país un Poder Judicial que sea evaporado entre las tramoyas de una camarilla indigna para la historia argentina”, subrayó la titular del Senado.
«Por favor, no importa si es un jurista de una u otra orientación, pero los argentinos se merecen volver a tener una Corte que sea llamada como tal sin ponerse colorado. Por favor se los pido a todos los partidos políticos. Es la imagen del país también”, agregó CFK, para remarcar que el poder judicial la “persigue y proscribe” al haberla condenado en primera instancia por corrupción a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ejercer cargos públicos.
En lo económico, la ex jefa de Estado recordó que el préstamo por 57.000 millones de dólares que el FMI le otorgó al Gobierno de Mauricio Macri «fue político» para sostener su gestión cuando estaba “mal”, por lo cual “la solución debe ser política».
«Si no logramos que ese programa que el FMI impone a todos sus deudores sea dejado de lado y nos permita elaborar un programa propio de crecimiento, de industrialización, de innovación tecnológica, va a ser imposible pagarlo por más que digan lo que digan», señaló.
«Néstor decía que los muertos no pagan las deudas. ¿Se creen que lo van a poder pagar únicamente con commodities? No, olvídense. Es imprescindible unidad nacional frente a eso. Fue un préstamo político y política tiene que ser también la solución», apuntó CFK.
Al respecto, Cristina sugirió implementar una metodología de pago de la deuda atada al superávit comercial. «En todo caso, que lo aten a un porcentaje de exportaciones, pero que dejen de querer dirigir la política y clausurarnos la industrialización del país y que seamos únicamente proveedores de materias primas. No alcanza únicamente con la materia prima, tenemos que agregar valor, incorporar tecnología», explicó la ex presidenta.
Por otra parte, insistió en retomar una política de «buenos salarios», situación que considera que se perdió en los gobiernos de Mauricio Macri y Alberto Fernández. “Trabajo de calidad y buenos salarios que es lo que es país necesita. Se puede hacer porque nosotros lo hicimos durante 12 años y medio. No es pecado pagar buenos salarios, al contrario, es de buenos cristianos», sentenció CFK.