Nació Facundo, el bebé gestado por un varón trans
Franco Di Pietro es una de las personas gestantes de la que habla la ley IVE aprobada el pasado 30 de diciembre, ya que también los varones trans, las personas intersexuales y de género fluido pueden tanto embarazarse y parir como querer interrumpir ese proceso.
«Estamos muy pero muy felices, nos cambió la vida», dijo a Télam Hannah Palacios, la madre de Facundo.
Franco Di Pietro, varón trans de 28 años, dio a luz por cesárea esta semana su primer hijo, Facundo, que nació sietemesino en un hospital porteño para alegría de la familia y del activismo LGBT+ que elige comunicar la noticia para reforzar aquello de que los partos no son cosa sólo de mujeres, sino de personas gestantes como dice la ley IVE.
«Estamos muy pero muy felices, nos cambió la vida, es una emoción que no tiene palabras», dijo a Télam Hannah Palacios (44), la madre de Facundo, también ella una persona trans.
Con la voz pintada de emoción, Hannah contó que el niño «nació sietemesino como yo» el lunes pasado por la mañana con casi un kilo y medio de peso, razón por la cual «hasta hoy está en incubadora para que se le terminen de desarrollar los pulmones y pueda respirar por sí sólo».
«Bajamos a verlo (a neonatología) dos o tres veces por día. Es una experiencia muy linda, con Franco estamos las 24 horas pensando en Facu, nos cambió la vida«, dijo.
La pareja espera que entre este jueves y mañana se produzca el alta de Franco -que sigue internado- mientras que el bebé, al ser prematuro, deberá permanecer un tiempo más internado.
«¡Es hermoso Facu! Verlo en la incubadora nos parte el alma, con el respirador y las sondas, pero tienen que madurar sus pulmoncitos», dijo.
«Sigue habiendo mucha discriminación hacia nosotros, más con Franco, que lo trataban de ella todo el tiempo»HANNAH PALACIOS
A pesar de la alegría, Hannah y Franco no pudieron dejar se sentir los efectos del trato inadecuado que les dispensaron algunos integrantes personal de salud en el Hospital Santojanni donde se produjo el parto, que no respetó su identidad de género.
«Sigue habiendo mucha discriminación hacia nosotros, más con Franco, que lo trataban de ella todo el tiempo», se quejó.
Por otro lado, Hannah aprovechó para llamar a la reflexión a los lectores y comentaristas de este tipo de noticias en redes sociales, algunos de los cuales «dicen cosas muy hirientes».
La joven explicó que «hay mucha gente tóxica que nos juzgan sin conocernos» y los agreden por su decisión de traer un hijo al mundo al que ya aman con todas sus fuerzas, «habiendo pedófilos o madres y padres que abandonan a sus hijos» a quienes no se les reclama nada.
«Por otro lado, quiero agradecer a mi familia, a casa Trans, a la FALGBT y a ATTTA por la buena onda que nos brindaron, por el aliento que nos dieron; y al equipo de neonatología, donde la atención es buenísima», agregó.
Franco Di Pietro es una de las personas gestantes de la que habla la ley IVE aprobada el pasado 30 de diciembre, ya que también los varones trans, las personas intersexuales y de género fluido pueden tanto embarazarse y parir como querer interrumpir ese proceso.
Si bien individualmente siempre habían tenido el deseo de tener hijos; Franco y Hannah nunca habían imaginado formar una familia con otra persona trans, hasta que se conocieron y enamoraron.
«Nuestro hijo fue gestado de forma natural, como lo hace cualquier otra pareja cisgénero que está buscando tener un hijo sin necesidad de recurrir a la fertilización asistida», contó Franco en la charla que mantuvo con Télam a principios de diciembre en el patio de la Casa Trans donde Hannah trabaja como promotora de salud .
La única diferencia respecto a una pareja heterosexual convencional, fue que Franco tuvo que «suspender el tratamiento hormonal» que venía haciendo hace unos cinco años «y esperar unos cuantos meses hasta volver a producir óvulos y menstruar», según explicó.
Y si bien individualmente siempre habían tenido el deseo de tener hijos; Franco y Hannah nunca habían imaginado formar una familia con otra persona trans, hasta que se conocieron y enamoraron.
«Si hubiera sido con una mujer cisgénero estaba la posibilidad de la inseminación y que gestara ella. Pero bueno, me enamoré de Hannah, surgió, vimos que era posible y le dimos para adelante», dijo entonces.
Conscientes de la gran cantidad de prejuicios que siguen activos en la sociedad y de la escasa receptividad del sistema de salud a las corporalidades disidentes, Hannah y Franco también resolvieron que estaban dispuestos a enfrentar todas las miradas y las preguntas incómodas que vinieran.
«Yo cuando decía que ‘voy a ser mamá’ y alguna gente me responde ‘no, vas a ser papá’. Incluso dentro del mismo ambiente, cuando digo ‘es mi marido y está embarazado’ me dicen ‘¿pero vos no te hiciste trans porque te gustan los hombres cisgénero?’. Y ahí yo les explico que no pasa por los genitales, pero la gente todavía está muy cerrada», dijo Hannah.