El Saocom 1B despegó con éxito desde la base de Cabo Cañaveral
El satélite argentino de observación con microonadas Saocom 1B fue lanzado hoy a las 20.19 de nuestro país a bordo de un cohete Falcon 9, de la firma Space-X, desde la base de Cabo Cañaveral en Florida, Estados Unidos.
El satélite argentino Saocom 1B estaba previsto en el plan estratégico que la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae) diseñó en 1994. Construido sobre la infraestructura del Cóndor II que no fue desguazada y reteniendo a parte de los investigadores de la disuelta Comisión Nacional de Investigaciones Espaciales (CNIE), en la Conae confluyeron también científicos que venían con experiencias en la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la empresa estatal rionegrina Invap.
Según se informó desde la Conae, el satélite “pesa 3.000 kilogramos, tiene 4,7 metros de altura y 1,2 metros de lado. Su plataforma de servicio consta de tres paneles solares de 1,51 x 2,7 metros cada uno. En total, su antena radar SAR desplegada mide 35 m2 con 7 paneles de 1,5 x 3,5 metros que la conforman y tiene un peso de 1.500 kilos. Orbitará a 620 kilómetros de altura y podrá obtener 225 imágenes por día.
Respecto al uso de los datos, el Saocom 1B logrará facilitar información referida a la humedad del suelo para uso agricultura e hidrología, mapas de riesgo de inundación, incendios y enfermedades de cultivos.
También detallará información para la toma de decisiones sobre temas de siembra y fertilización, determinación del agua disponible en nieve para riego, desplazamiento de glaciares y terrenos, así como pendientes y alturas, entre otras aplicaciones.
El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza, agregó que el Saocom 1B ratifica que Argentina posee “un dominio de la tecnología de radares muy alta que muy pocos países poseen y pone de relieve nuestra capacidad científico tecnológica”.
“Este nuevo satélite forma parte del plan espacial argentino a cargo de la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (Conae). Junto al Saocom 1A es de mucha complejidad tecnológica que implica un dominio de la tecnología de radares muy alta, que muy pocos países poseen, y pone de relieve nuestra capacidad científico tecnológica”, explicó Salvarezza a la agencia estatal Télam apenas despegó el Saocomn 1B.
El ministro consideró que “este satélite es líder en el mundo y fue desarrollado por empresas como el Invap (diseñó la plataforma electrónica del radar) y Veng (servicios de ingeniería en sistemas) junto a otras 80 empresas e instituciones y más de 900 personas que trabajaron en un proyecto también con la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNAE), desarrolló los paneles solares, y la Universidad Nacional de La Plata, que diseño la malla de protección”.
Como un producto derivado de la puesta en órbita del Saocom 1B, y el ya en órbita Saocom 1A, se podrá comercializar sus imágenes a nivel internacional para los países que lo requieran.
“Estas imágenes proveerán datos de mapas de agua, suelos o riego de valor muy útil para nuestros agricultores y los países que las requieran”, dijo Salvarezza, quien agregó que apareció “una veta para ofrecerlas al mundo” y generar nuevos recursos.
Respecto a la continuidad del plan espacial argentino, luego de haber puesto en órbita el Saocom 1B, el ministro ratificó que el gobierno está dispuesto “a continuar con el plan espacial, que estaba bastante abandonado cuando tomamos el Ministerio”.