La actriz ofrece este domingo por streaming desde el Teatro Picadero un espectáculo en el que conjuga monólogos de obras clásicas y canciones acompañadas por un barítono y un laúd.
Este domingo por streaming presenta «La Rosa de Maravilla».
La actriz Malena Solda, que este domingo interpretará en vivo por streaming desde el Teatro Picadero «La Rosa de Maravilla», puesta de monólogos de obras clásicas y canciones acompañadas por un barítono y un laúd, celebró la posibilidad de encabezar «un desafío artístico» en este contexto, aunque advirtió que en medio de la pandemia «faltó una reflexión respecto del lugar que debe ocupar el teatro».
«Será una experiencia extraordinaria y única», anunció Solda en diálogo con Télam sobre la versión de «La Rosa de Maravilla», puesta que conjuga monólogos y canciones acompañadas por Víctor Torres (barítono) y Miguel de Olaso (guitarra barroca, laúd), que se estrenó en 2012, que desde entonces se presentó en distintos escenarios del país y que este domingo se emitirá a las 18 en vivo desde el El Picadero vía streaming (con entradas a través de PlateaNet).
«La posibilidad de comunicarnos con la gente que está en sus casas -apuntó Solda- que tiene restricciones para salir, nos pone a todos emocionalmente en un lugar diferente, nuevo, donde los textos que venimos haciendo desde hace muchos años, en este contexto, cobran otro significado y emocionan desde otro lugar, con mucha más potencia».
Los textos que venimos haciendo desde hace muchos años, en este contexto cobran otro significado y emocionan desde otro lugar.”MALENA SOLDA
La puesta, cuyo repertorio de textos y canciones acompañadas por instrumentos típicos de la época, recorre piezas de Francisco de Quevedo, Lope de Vega, John Middleton, John Dowland, William Shakespeare y Federico García Lorca, será una de las primeras piezas de teatro hechas en un teatro en vivo en el nuevo contexto de pandemia.
«Esto sería un mix porque el teatro no puede todavía, y en la puesta cada uno de estará sentado en semicírculo, con dos metros de distancia y hablando al público, que no va a estar», detalló la actriz de piezas de teatro como «Una bestia en la luna», «La celestina», y «Blackbird».
Y agregó que «como artistas, la perspectiva de poder estar juntos en un escenario después de tantos meses y de comunicarnos con la gente que no está ahí en vivo pero que está escuchando, es un desafío».
«Todas las cosas nuevas me producen curiosidad y me parecen interesantes -reconoció- y esta en particular no quería dejar de vivirla, me da muchas ganas, me parece que es un diamante en bruto porque en general es muy difícil concentrarnos en esta época de tanto estímulo, incertidumbre, tecnología, noticias, emociones y ansiedades».
Y añadió: «Poder tener una hora del tiempo de la gente es un privilegio para el que quiere escuchar y el que necesita ser escuchado porque se trata de una apuesta de las dos partes: del que compra el pase e invierte tiempo y dinero para ver qué es, y para nosotros que nunca hemos trabajado en estas circunstancias y eso puede hermanar».
No obstante, la actriz ganadora de premios ACE, Estrella de Mar, Clarín y Cóndor de Plata entre otros, consideró que desde la disposición del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio el 20 de marzo pasado hasta hoy «no ha habido una reflexión respecto al lugar del teatro».
«Hay un debate ahí que no se está dando, no han convocado a las voces que tienen algo para decir, un poco porque estamos todos apabullados por lo que sucede y otro porque no sé si desde las instituciones los están convocando», opinó.
Si bien reconoció que la pandemia obligó al Estado a ocuparse de muchos frentes en simultáneo, resaltó que «en la cultura hay un debate que no se está dando, una conversación profunda en relación al rol del teatro en un contexto así».
«Yo no tengo una respuesta, si no hubiese pedido que me escucharan, pero creo que sería bueno que convocaran a directores y directoras con cabezas amplias para poder reflexionar», propuso.
En tanto, durante estos cuatro meses de cuarentena, mientras continuaba con sus clases de teatro para adultos y niños en formato virtual, Solda admite haber visto «producciones teatrales de años anteriores, mejor o peor filmadas, con limitaciones técnicas, sin limitaciones» que resultaron nutritivas en una etapa que tildó de «reflexiva».
Sin embargo, fue contundente al referirse al teatro en vivo, «con la emoción de saber que esa persona está en ese momento en otro lugar, tal vez muy lejano de donde vos estás, pero que estamos los dos en el mismo momento vibrando en el mismo lugar».
«Eso es muy emocionante y tiene que ver más con la comunicación que con las bases del teatro en sí, con la posibilidad de tender puentes, de que se acorten las distancias que en este momento son tan dolorosas, estresantes, de sentirnos más cerca que con otra cosa», reflexionó.