Fuerte caída de los controles ginecológicos y en las consultorías de salud sexual
La cantidad de controles ginecológicos de rutina en instituciones públicas y privadas se desmoronaron en hasta un 70% de manera generalizada durante la pandemia, a excepción de urgencias, procedimientos de Interrupción Legal del Embarazo (ILE) o programados, mientras en algunos casos algunos controles fueron reemplazados por “teleconsultas” con profesionales y con el envío por correo electrónico de recetas para anticonceptivos.
Así lo indicó la médica Natalia Kienast, ginecóloga y obstetra del CEMIC, quien sostuvo que “tratamos las urgencias, pero conviene esperar hasta septiembre para retomar los controles rutinarios”, sobre todo “en pacientes sin antecendentes”.
En la provincia de Buenos Aires, la directora de Equidad de Género del Ministerio de Salud bonaerense, Sabrina Balaña, explicó en declaraciones formuladas a la agencia estatal Télam que “en general se recomienda que no se posterguen los controles ginecológicos imprescindibles, pero sí aquellos que son anuales para los casos sin factores de riesgos”.
En el marco de la pandemia y el aislamiento social obligatorio actual, en sintonía con lo que sucede con otras consultas médicas, los especialistas advierten que han disminuido también las referidas a la salud sexual y anticoncepción.
“Desde sociedades como la de Ginecología Infanto-Juvenil, el Plan ENIA y el Programa de Salud Sexual y Reproductiva del Ministerio de Salud, se empezaron a hacer campañas para recordar que la salud sexual y reproductiva es un servicio esencial e informar que los centros sanitarios, los hospitales y los consultorios tienen la obligación de proveer los métodos anticonceptivos que la paciente estuviera utilizando hasta el momento”, destacó la doctora Marisa Labovsky, médica ginecóloga especialista en endocrinología ginecológica y en ginecología infanto juvenil. Preocupa entonces que esta situación pueda desencadenar un aumento de embarazos adolescentes.
En Argentina el Programa Nacional de salud Sexual y Procreación Responsable garantiza a toda la población el acceso a la información, orientación, métodos y prestaciones de servicios referidos a la salud sexual y procreación responsable, incluidos los métodos anticonceptivos de acción prolongada (LARCs por sus siglas en inglés) como el implante subdérmico (conocido entre las más jóvenes como “chip anticonceptivo”) o los dispositivos intrauterinos, son el tipo de anticonceptivo reversible de mayor eficacia.
Es recomendado como la elección de anticoncepción de primera línea para adolescentes. “Hay disponibilidad de métodos, el plan ENIA y la Dirección de Salud Sexual y Reproductiva tienen disponibilidad de implantes y DIUs. El problema es que las pacientes en general no están yendo a los centros de salud por miedo al contagio de coronavirus. En el ámbito privado están autorizadas las recetas en forma online, por WhatsApp o email y hay muchos consultorios que están funcionando y están atendiendo y colocando métodos de larga duración a las pacientes que así lo requieran con todos los protocolos de cuidados que hay que tener en este momento”, explicó Labovsky.