La ola que no fue ola y la heroica de Julio Garro en La Plata
¿Alguien vio venir el resultado de las PASO? Nadie. De hecho, el 11 de agosto sorprendió a propios y ajenos. A tal punto que el equipo de Julio Garro había armado tres discursos: uno por si perdía Macri en La Plata, pero él ganada; otro por si perdía Vidal en la ciudad y él ganaba, y otro de él ganador. Nunca barajaron la posibilidad de perder dicha elección. Algunos dirán que en realidad, no la perdió ya que había sido el dirigente más votado en la ciudad, sin embargo, las caras de derrota y preocupación en el búnker de calle 13, esa noche, eran tétricas.
Del otro lado, Saintout se daba ganadora alrededor de las dos de la mañana, mientras que Tolosa Paz anunciaba un empate técnico que nunca existió ¿Por qué recuerdo algo que parece tan lejano? Porque desde las PASO a la fecha, el gobierno local frenó una “la ola del Frente de Todos” contra viento y marea.
Si hubo un dirigente que entendió el mensaje de las urnas fue Julio Garro. Se volcó de lleno a municipalizar la elección, colmó la ciudad de pasacalles con su foto, cambió radicalmente su discurso y se despolitizó de su referente: Mauricio Macri. Sí, no le tembló la mano para ocultar al Presidente a tal punto de negarle la marcha del “Sí se puede” en la ciudad. Fogoneó a más no poder el corte de boleta, e incluso, entregó su lista cortada con el resto de los cuerpos del Frente de Todos. Además, realizó una catarata de promesas que tendrá que resolver cómo cumplirá a partir del 11 de diciembre.
Se puso la campaña al hombro y se mostró hasta el cansancio en todos y cada uno de los lugares y actos que le ofrecieron. También cerró con espacios de peronismo, algunas agrupaciones jugaron a “dos puntas”; fue a buscar los votos que se “escaparon” de la interna del Frente de Todos, y jugó muy fuerte con algunos medios de comunicación y centros de poder de la ciudad.
¿Del otro lado? Tras haberse dada ganadora, Florencia Saintout se sentó y recibió a todos y todas, pero con muy pocos se mostró de cara a la sociedad. Apuntó a “nacionalizar” la campaña y enfocó su discurso en “Alberto y Cristina, Axel y Verónica”. En cada acto al que asistió remarcó una y otra vez que era “con todos y todas”, pero a sus espaldas se empezaban a conocer jugarretas de varios sectores del peronismo que no fueron a su favor.
La “no campaña” se sintió. No significa que no haya caminado ni mucho menos, de hecho, en esta elección, Saintout se llenó de muchísima militancia que no era de su espacio. Pero “no hubo campaña”. Nunca se terminó de entender a qué electorado se dirigía ni cuál era su mensaje en la ciudad.
Con el diario del lunes, vuelve a resurgir una pregunta que muchos se hicieron aquel lejano 22 de junio, día del cierre de listas: ¿Eran necesario cinco candidatos en La Plata? Quedó evidenciado que “el que gana conduce y el que pierde acompaña” no funcionó.
Las últimas semanas las figuras de Alberto Fernández y Axel Kicillof cayeron algunos puntos en la ciudad y esa alarma no fue escuchada por el espacio.
También es cierto que la remontada de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal en la ciudad fueron una sorpresa para todos y todas. Las pésimas decisiones del Presidente, la crisis económica y la devaluación que realizó los últimos meses hacían imposible pensar que Macri podía repuntar. Sin embargo en La Plata lo imposible fue posible.
La ola no fue ola y la heroica de Julio Garro terminó dándole cuatro años más de poder en la ciudad. Los nueve puntos de diferencia fueron “la sorpresa” en La Plata. La elección pareciera hacer “jubilado” a una dirigenta y haber posicionado al otro como uno de los líderes de la futura oposición que se viene.