El Gobierno pedirá este jueves ante Loretta Preska que revea el destino de la causa por la reestatización de YPF en 2012. El fondo Burford Capital, quien demanda, apuntará a que el reclamo es extemporáneo y una actitud «desesperada» del país.
Según adelantó el diario Ámbito Financiero, la Argentina insistirá en que la causa se mude a Buenos Aires al cuestionar la operación de venta en 2008 del 25% del paquete accionario de la petrolera al grupo Petersen. El juicio le podría costar al país entre 2.500 y 3.000 millones de dólares.
Los abogados que representan a la Argentina, del estudio Skkaden, apuntan a la necesidad de investigar en Buenos Aires la posible ilegalidad de la compra, de la existencia de testigos que no pueden salir del país y que deberían declarar -como Julio de Vido- y de las dudas sobre la operación del préstamo de Repsol YPF por la cual Petersen llegó a la compañía.