Tras el anuncio de la fórmula Fernández-Fernández, que se realizó el sábado 18 de mayo, el escenario electoral quedó modificado completamente. En ese sentido, una cuesta de TresPuntoZero sobre mil casos analizó cómo se tomaron los argentinos la primera fórmula presidencial oficializada.
A 24 y 48 horas del anuncio, el 82,9% no se había enterado de la noticia y sólo el 17,1% estaba al tanto de la dupla Fernández-Fernández. De ese porcentaje el 87,2% son jóvenes de entre 16 a 29 años y casi todos con educación universitaria. En tanto, el 22% restante son mayores de 51 años.
Otra de las preguntas que le realizaron a la población es la posibilidad de votar a Cristina Fernández de Kirchner: un 52,8% seguramente la votaría y/o podría llegar a votarla, mientras que el 44,6% restante nunca la haría. En ese sentido, ésta es una de las primeras encuestas que muestran que la expresidenta tiene más intención de voto positiva que negativa.
Su compañero de fórmula y candidato a presidenta, Alberto Fernández, está en condiciones similares: casi 50,6% lo votaría y el 46,1% no. Los restantes punto están indefinidos. Es por ello que el dirigente se centró, en el acto de Merlo, en pedirle a la militancia que convenza a los “desencantados” y “decepcionados” con la gestión actual.
Por otra parte, un 51,8% de los consultados se sintió esperanzado, alegre y con alivio, mientras que un 42% sintió miedo, temor y tristeza respecto de la precandidatura de Alberto Fernández. Para ello, el político trata de mostrarse sereno, generar empatía con la gente y no ser agresivo en sus declaraciones. De los porcentajes mencionados, aquellos que vieron con buenos ojos al dirigente tienen entre 30 a 50 años, mientras que los que superan esa edad lo percibieron negativamente. Curiosamente la generación de Fernández es que no está acompañando, en este momento, al candidato.
Sin embargo, del otro lado de la grieta los números son peores. Si Macri fuera por la presidencia nuevamente, el 70% de los jóvenes entre 30 a 50 años sienten miedo, temor y tristeza, mientras que los mayores de 51, misma generación del actual mandatario, esperanza y alivio. A la hora de definir, el presidente sigue restando: el 56,3% no le daría su voto nuevamente.
En lo que respecta a la gestión del Presidente los números también son alarmantes: un 66% de los consultados la ve como mala y muy mala, y el 31% restante entre buena y muy buena. En esa línea el 51,7% quiere Macri no esté más, un 34,5% que siga pero con mejoras, y sólo un duro núcleo del 13,3% banca al gobierno tal cual está.