La modelo Natacha Jaitt consumió cocaína y alcohol la noche de su muerte, según determinaron las pericias toxicológicas.
De acuerdo a fuentes judiciales, otro punto importante que especifica el estudio es que la actriz padecía una patología cardíaca -su autopsia reveló una isquemia- y una patología pulmonar, entre otras afecciones. Además, el informe detalla que no se halló otro tipo de sustancias, es decir que en el cuerpo de Natacha no se encontró ningún tipo de veneno, una especulación que fue parte de las hipótesis de la familia Jaitt.
En tanto, el abogado de la modelo había adelantado que más allá de los resultados de las pericias toxicológicas pedirá la exhumación del cuerpo para extraer muestras para otros estudios complementarios donde se pueda detectar si fue o no envenenada.
Jaitt (41) murió la madrugada del 23 de febrero último en el salón de fiestas «Xanadú», de villa La Ñata, Benavídez, partido de Tigre, al que había concurrido por una reunión de negocios para programar un evento. En un momento de la noche, durante la cual se consumieron drogas y alcohol, la conductora y modelo sufrió una «insuficiencia respiratoria por edema agudo de pulmón» y una «falla multiorgánica» y murió, según los resultados de la autopsia.